1.Activación celular
El efecto de resonancia activa las moléculas de agua en el cuerpo, dividiéndolas en grupos más pequeños y activos. Esto estimula la actividad de las proteínas en las membranas celulares, lo que permite que el oxígeno y los nutrientes pasen a través de ellas de manera más efectiva, lo que alimenta el metabolismo celular. Experimente estos beneficios con una sauna de infrarrojos casera o una sauna de infrarrojos lejanos diseñadas para uso diario.
2.Circulación sanguínea mejorada
Los rayos infrarrojos penetran profundamente en la piel, elevando la temperatura interna y expandiendo los microvasos. Esto mejora el flujo sanguíneo, revitaliza las enzimas y fortalece los procesos metabólicos. Una sauna de infrarrojos lejanos puede ayudar a los usuarios a mantener una salud óptima mientras se relajan en casa.
3.Metabolismo mejorado
El calor infrarrojo lejano estimula la actividad celular, acelerando la eliminación de desechos. Una circulación mejorada ayuda aún más en la eliminación de toxinas, promoviendo una mejor salud general. Las saunas de infrarrojos lejanos para el hogar son perfectas para quienes buscan desintoxicación y relajación.
4. Inmunidad mejorada
Los rayos infrarrojos lejanos mejoran la función fagocítica de los macrófagos, fortaleciendo la inmunidad tanto celular como humoral. El uso regular de un sistema doméstico de sauna de infrarrojos puede contribuir a un sistema inmunológico más fuerte y a una mejor salud.
5.Alivio del estrés y regulación del sistema nervioso autónomo
El sistema nervioso autónomo regula las funciones de los órganos. El estrés crónico puede alterar este equilibrio y provocar dolores de cabeza, insomnio, fatiga y mala circulación. El calor relajante de una sauna de infrarrojos en casa puede ayudar a restablecer el equilibrio, reducir la ansiedad y mejorar el bienestar general.